El centro del lago de la luna

Una pequeña Republica del desconcierto y la desazón.

viernes, julio 07, 2006

Pensamientos negros

Los que tengan curiosidad pueden encontrar información sobre Dormida Silvanes en esta página. Lamento no poder colgar la canción por causas de fuerza mayor. En ese momento necesitaba esa canción e igual que vino la borré. Sed felices


Suena en el reproductor del ordenata "Pensamientos negros" y como cada vez que la escucho, se me erizan los cabellos... y otras cosas. Y hoy que no pasa nada y que nada transcurre hablo de esa canción porque hablar de otra cosa es demasiado tremendo. Pensamientos negros es un poco ranchera y un poco bolero y a pesar de que son dos estilos de música que me habitualemente me introducen en un estado de placentera somnolencia en esa canción, no. Me entusiasma, me pone la piel de gallina, me dan ganas de.... ya sabeis. Lo canta Dormida Silvanes a la que conocí buscando otras cosas en la mula. Me hizo gracia el nombre y me bajé la canción con más fuentes disponibles, que era esa. Y la escuché y ahora hablo de ella y en el fondo hablo de mí y de cualquiera, que somos uno mismo y diferente.

Luego investigué sobre Dormida, cantante y compositora de la canción. Ella en realidad se llama Juana pero todo el mundo la conoce así porque cuenta su madre que la niña al nacer no se movía y que por muchos azotes que la dieron, no reaccionaba. Sus padres se pensaron lo peor hasta que el médico les tranquilizó diciéndoles que era la primera vez que le pasaba pero que su hija había nacido dormida. Creo que en Mexico leen demasiado a Rulfo, pero no deja de ser admirable (sobre todo desde el punto de vista de un mago) tanta vocación por lo mágico que recuerda a las sonrisas de Big Fish y aldeas llenas de muertos que no asustan. No se si esa historia es verdad. En realidad da un poco igual. Juanas hay mies en el mundo, pero Dormidas con mayúscula de nombre propio, una sola. Dormidas y encantadoras muchos millones y Ella.

Lo más curioso de Dormida es que nació en Oaxaca de padres pudientes y no se le conocen dramas ni alcoholismos ni drogas. Está casada y tiene dos hijos con apenas 28 años. ¿Porque canta tan triste entonces?. A Chavela se le comprende el desgarro y a Frida el dolor, pero porque esta chica canta así. Y pienso que la primera virginidad que se pierde es la de las entrañas cuando se revientan y que hay soledades que no apagan ni siquiera los tumultos (que las encienden que las desvelan). Pero seguro que pienso mal y son efectos de sonido y todo es mentira. Solo que esto es verdad y la tierra es redonda.

Ví a Dormida en Clamores (sala de música de los madriles) una sola vez. LLegue tarde y acojonado de que ya la hubiera cantado. No lo había hecho. La dejó para el postre y la recitó con los ojos cerrados. Era como escuchar un libro de Onetti. Cuanto silencio a su alrededor. Cuantas formas de posponer el parpadeo, la respiración y las ganas de latir. Cuantas ganas de salir al escenario abrazarla y consolarla y consolarse y consolarnos. No pude aplaudir cuando acabó. Ahora lo hago aunque no me oiga. Aunque esté dormida...

y borracha y medio loca
a mi hombre yo le espero
pero solo me alcanzan abismos
solo pensamientos negros

Y sin embargo quiero apagar un ordenador que ya está apagado. Y sigo escuchando una canción que no suena.

domingo, julio 02, 2006

Esta juventud...

El problema no es si nosotros creemos en Dios. El problema es si Dios cree en nosotros.

Los lunes al sol



Una noche una playa un verano. Cualquiera en todos los casos porque precisar es poner límites.

Una chica. Un chico. Guapos a su humilde manera de entender la belleza. Sentados sobre la arena en la que sumergen sus manos y sus pies desnudos. El cielo está lleno de estrellas y hablan entre ellos de tonterías minúsculas. Es la última noche de sus veranos eternos. El verano que viene no será allí, no será tan largo no será juntos. Llevan un mes pelando la pava gustándose y sintiendo miedos tan propios de la edad (y de estar vivos) pero el sonido del mar (que se va que se viene que arrastra piedras adormeciéndolas), las luces del mundo que palpitan en las aguas e insinúan secretos, las Cariátides que lloran en el cielo, los silencios que les acusan. La última noche. La noche.

La chica piensa. Yo quiero posar mis dedos en su cuello para señalar un beso, uno resbaladizo al que regresen los dedos un poco más tarde y deslizarlos hasta atrapar su pecho y persistir en la caída libre primero los brazos y luego sus manos y quedarme un rato allí, uno, dos tres segundos, bueno mejor cuatro, bueno quizás cinco y abandonarle pero sólo para regalarle pecados. Que mis manos lleguen a su pantalón y lo desabrochen, que no se detengan allí y descubran sus calzoncillos. Desprenderlos y asistir divertida a ese ligero respingo. Tomarle para mi y posar los dedos para señalar los besos y seguir la caida libre...quererte eternamente esta noche.

El piensa. Yo quiero mordisquear tus labios sin calma y cogerte el rostro firmemente y mirarte pero solo para no entender que hago sin besarte y regresar el intento y volver a tus labios y quedarme allí. Yo quiero volverte a mirar y entender tu mirada, que acata, que consiente y mientras te miro sin pausa, dejar que mis manos se tornen traviesas. Tomar el tirante de tu camiseta y dejarlo caer. Primero un hombro y luego dos, primero un pecho y luego dos. Medir su peso con mis manos, revelarlos con una caricia sin fin. Recorrer la ruta de las seda por tus piernas. Yo quiero mordisquear también esos labios sin calma... quererte eternamente esta noche.

Pero habitan el mundo de las ideas. Las estupideces que pronuncian poco a poco se apagan y dejan paso al silencio con el que desvelansu cobardía. No se aprovechan de los hados, se darán un beso en la mejilla y se mentirán diciéndose que se escribirán o que volverán a verse. Se irán a fin de cuentas. Todo lo demás no importa.

Y UNA MIERDA

Que?

HE DICHO QUE UNA MIERDA

El chico se ha levantado y completamente indignado me ha soltado esto. La chica ha dicho algo relativo a mi madre, no se el qué.

¿Como que una mierda?, les respondo

La chica habla. No me había fijado pero tiene unos ojos furiosos y negros.

Una M,I,E,R,D,A a ver que letra no has comprendido. Pero tu ¿quien coño te piensas que eres, imbécil?. ¿Te crees acaso que por el mero hecho de escribirnos tienes derecho a jodernos la vida?. Por que yo creo que no, que eres un pobre idiota al que no se le levanta o algo parecido. Un listillo, un tocapelotas que dicen en mi pueblo

Que más te hubiera dado dejarnos fornicar a gusto y en paz. Replica el chico. Suda y le brillan los músculos. Nunca le había visto así. No, tú, que eres el más guay, tenías que mandarnos a nuestras casas con un calentón de pelotas a que nos comiésemos la cabeza durante toda nuestra vida sobre lo que pudo ser y a tí no te dio la gana que fuera.

Muy, pero que muy cabreados les veo. Se miran y se dan fuerzas. Se desean, la verdad, se desean mucho

Y además, eres un lila, continúa el chico crecido. Pues no vas y a bajarle las bragas le llamas ruta de la seda, pringao.

Pues no te lo pierdas que a que se te ponga dura le llama ligero respingo insiste ella con una sonrisa febril. De ligero nada, piensa divertida

Pero

Pero nada. El chico se pone más gallito. Mira, que como no nos dejes hacer lo que está mandado que hagamos, como te me cruces en mi camino te voy a poner el rostro del revés a ná que te descuides

Y ella suspira y le toma de la mano y le pide que se siente y me dice.

Escúchame, por favor, este es un cenutrio, es buen tío y me hace sentir diferente, pero al fin y al cabo un cenutrio. Yo se que no podemos hacer nada, ni amenazarte ni exigirte ni amedrentarte porque al parecer los personajes no tenemos derechos humanos ni fundaciones que nos protegan. Puedes eliminarnos cuando quieras, darle repetidas veces a la tecla de borrar y nosotros jamás habremos existido. Pero prefiero no existir a existir a medias. El es guapo y yo guapa a nuestra humilde manera de entenderlo como dices tú, y nos gusta esta playa y este ruido y nos gustamos nosotros, que no siempre pasa. Mañana nos iremos cada uno a su casa y eso, si es que llegas a escribir sobre mañana. Pero esta noche te pido por favor que escribas sobre nuestros cuerpos. Por favor. Lo dice con una voz tierna que me recuerda algo…Por favor

Y cumplo. De nada serviría hablarles de mi intención nostálgica, comentarles acerca de los veranos perdidos o grandilocuencias similares. Tolero pero no perdono y juro condenarles al olvido mañana mismo sin falta. Pero eso será más tarde y me temo (y me alegro) que apenas importará, porque ahora…

Ella posa sus dedos en el cuello de él para señalar un beso, uno resbaladizo al que más tarde, regresen los dedos…

Él mordisquea sus labios sin calma y le coge el rostro firmemente y la vuelve a mirar, pero solo para no entender porque no continúa besándola y regresa al intento y vuelve a sus labios y se queda allí