El centro del lago de la luna

Una pequeña Republica del desconcierto y la desazón.

miércoles, febrero 22, 2006

Reflejos, que no mechas.






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Un sútil estremecimiento, una levísima luz que me adormece, un ritmo indefinible que nace en los latidos del mundo y se desvanece a las puertas de un paraiso de cartón piedra a donde van a pudrirse las almas de los que un día creyeron ser elefantes y buscaron un cementerio que no existía.




Y de que serviría decirlo así, quién coño te entendería si ni siquiera acabas de entenderlo tu. Al fin y al cabo ser poetista no es sino otra forma de ser cobarde, escondiéndote detrás de palabras que de lo único de lo que estan llenas es de Ecos que le piden a sus Narcisos que por favor vayan a recogerlas, que se sienten solas, que ya les vale. Se alaba de este y de aquel la valentía de verse reflejados en sus páginas espejos y tu niegas y preguntas donde está el riesgo si comprender es una quimera, si ni siquiera puedes conocer a nadie por sus miradas que mienten porque ni siquiera saben que es la verdad . Como explicarte como decirte.

Será la luz. Es la luz. Tiene que ser esa luz que no se atreve ni a ser día ni a ser noche, que igual te ofrece el sol que después te lo niega y que ahora es gris, limpía y sin un solo rasguño.

Tal vez un ronroneo, una caricia epidural que nace en lo profundo y pasa por las entrañas serradas, atraviesa la glotis con mimo y desemboca en una lengua que solo atina a decir: "No se". Es una sensación si, algo tierno que escuece, un poco blanda, un muy callada. El vientre abultado y oliendo a tierra mojada, descompuesta. Hermafrodita, solitario, insignificante, ingrávido, in-cualquiercosaqueimagines-. Como echar de menos algo que no estas seguro de recordar. Sentir cosquillas en el alma que hace tiempo te extirparon por prescripción médica. Como la angustia, sólo que sin tanta tragedia... y de fondo el terror a que no exista la palabra que te defina, a quedar condenado de por vida a la invisibilidad.



... pensaba el albañil sólo delante del espejo de un baño de un bar sin nombre y sin lugar. Se regaló una sonrisa triste y contuvo la respiración, uno, dos, tres, hasta que le surgió un estruendoso erupto que le hizo sentirse algo mejor. Tenía que volver al tajo. Esa noche jugaba el Atleti y quería acabar pronto.

8 comentarios:

Blogger Bito ha dicho...

Y que sean los pensamientos los que entorpezcan la vida...

Me gusta ese erupto como resultado final a tan incorporeas conclusiones...

7:00 p. m.  
Blogger Larha ha dicho...

Me has dejado sin palabras, si las tuviera o encontrara serían de admiración, completa admiración. Me ha encantado. De lo mejor que te he leido.

7:36 p. m.  
Blogger cieloazzul ha dicho...

Ay Señor, es el día y la noche sin esa luz la que me tiene desde hace muchos días con los ojos ciegos y la lengua muda....
me quedan los dedos.. y el tecleo.
muchos besos...
Hermoso texto, coincido con SINMÁS.... de lo mejor que se ha leido en los ultimos días grises.....

Un beso enorme... y Respetuoso.
de admiración.


Bito, que gusto leerte aquí, un beso para ti.

8:48 p. m.  
Blogger Msc ha dicho...

... acabar pronto.
Se me ocurren muchas cosas, pero jugando nuestro aleti... Puff

Moraleja: Depués del infierno hay vida

6:54 p. m.  
Blogger Lula Towanda ha dicho...

Que bruto, que contraste y meter al Atleti en la cruda realidad y no en la parte poética tiene delito.

3:42 p. m.  
Blogger Patricia Angulo ha dicho...

Ha sido grato esta mañana encontrar tu blog, me he paseado por él y me has dejado boquiabierta con algunos textos, especialmente el de la bella del mundo mundial, qué ternura tenía la bestia con barriga que podia ver esos versos y escribirlos luego-

Un saludo y te invito a que pases por el mío.

4:37 p. m.  
Blogger Lince ha dicho...

y pensar que solo a ratos levantamos la cabeza y miramos alrededor, descubriendo que aquello que nos aflige, que nos aterra o que nos trae de rodillas buscando una respuesta está delante de nuestros propios ojos...
somos sacos de dudas, supeditados a nuestras emociones, esclavos de las ondas de nuestro cerebro, de los neurotrasmisores y del pie con el que nos levantamos.
y TODOS somos así, por muy únicos que nos sintamos.

gracias zif, por lo que escribe y por lo que me llega.

1:06 p. m.  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Con lo bien y bonito que iba todo y al final.. ese cambio. Besos

8:27 p. m.  

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