El centro del lago de la luna

Una pequeña Republica del desconcierto y la desazón.

lunes, octubre 17, 2005

Swatch

Odio a los suizos. Ya ves tu. A la mayor parte de la gente le aburren, los más les echan en cara ciertos comportamientos bancarios de dudosa ética. Otros dicen que los suizos ya tienen suficiente con que el bollo que lleva su nombre sea tan soso. A mi me caen mal, manías que tiene uno.

Si ya al hombre, el todopoderoso y grandilocuente hombre, le dio por ponerle puertas al mar e inventarse el tiempo...

El tiempo no existe. El tiempo nos lo sacamos nosotros de la manga, como si fueramos un ilusionista decadente y torpe. Nosotros nos creemos la medida del tiempo. Cuando hablamos de años nos referimos a una realidad que sería distinta si viviésemos en otro planeta. El tiempo es algo tan inabarcable que quizá podamos parecer algo estrechitos de miras al escoger una medida tan ridícula. Si Dios existe el tiempo no, en cuanto a que alguien que no desaparezca, no sabe de principios ni finales, ni tampoco de transcursos. Si Dios no existe el tiempo tampoco, puesto que no hay nadie que tenga memoria para saber si comenzó, o si se repite o si va a desaparecer. Y sin embargo, nosotros una vez más, nos creemos el culo del mundo y pretendemos domarlo, reducirlo a realidades más asequibles para nuestra imaginación. Lo domesticamos, lo reducimos a una simple anectoda, un grano de arena en unr ecipiente de cristal, una sombra miseráble sobre la fachada de un edificio con fecha de caducidad. El tiempo se rie de nosotros cuando nos morimos.

... van los suizos y se inventan abominables mecanismos repletos de engranajes, poleas, ruedecitas, cuerdas, metales, maderas, piedras preciosas, pájaros muertos, leñadores bailarinas y obispos, que son bonitos, pero joden porque suenan. La única forma decente de medir el tiempo es cualquiera que haga discreto su transcurso. Nadie puede saber cuanto tiempo ha pasado si no mira un reloj digital, y como coño se sabe en que hora vives escuchando un reloj de arena (incluso mirándolo, que esa es otra). Pero a los suizos eso les da igual. Inventan relojes obscenos que declaman con descaro nuestra absurda mortalidad. Y cuando las cosas van mal dadas, cuando los problemas circulan circulares en el sentido de las agujas del reloj (no podía ser de otra forma) siempre hay un puto reloj que te patea las tripas por cada paso que da. Insisto odio a los suizos aunque los suizos no tengan la culpa.

Sed felices.

14 comentarios:

Blogger Blanche ha dicho...

no es bueno odiar
tengo como 10 swacth
no tengo cuentas en suiza (me gustaria)
me gustasn las vacas el queso y el chocolate
he ido muchas veces y me encanta
ah! por cierto , aunque nacida en madrid, mi familia es suiza...
que más decirte..?? jejejme alegro que te guste mi blog.
BESOTES

10:01 a. m.  
Anonymous Anónimo ha dicho...

10:05 a. m.  
Blogger Zifnab ha dicho...

Sabía yo que iba a pasar esto, pero por aquello de explicatio non petita acusatio manifiesta pues no lo aclaré. En realidad, no odio, ni detesto ni siquiera me aburren los suizos. Más que nada porque no conozco a ninguno, y porque lo de odiar,y sobretodo a tanta gente como son los habitantes de suiza sería un coñazo, demasiada amargura. Lo único que odio son los relojes que suenan demasiado y lo de los suizos ha venido por aquello de los tópicos. Pero en serio, suizos del mundo podéis venir ami, que no tengo nada contra vosotros.

Besos a Blanche y al puntito de tt

10:37 a. m.  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Pues a mí los suizos me dan igual, lo que odio son los relojes, pero si hay que odiarlos por haber sido ellos los que se han encargado de hacer tan repulsivas máquinas, pues ea, te dejo el honor de odiarles.

3:49 p. m.  
Blogger cris ha dicho...

Esto...¿y no has pensado en, simplemente quitarte el reloj de pulsera y tirar el despertador y comprarte un gallo?

5:38 p. m.  
Blogger Isthar ha dicho...

Y yo que estoy enamorada de Suiza, que tengo además familia suiza, amigos suizos, y que adoro el chocolate suizo... Mal empezamos :P

Supongo que no tendrán ellos la culpa de que el mundo se empeñe en meter el tiempo en objetos de números y agujas que en realidad sólo intentan medirlo. Porque el tiempo es demasiado abstracto para dejarse encerrar en un reloj, aunque sea suizo.

Mil besos sin tiempo

7:26 p. m.  
Blogger Zifnab ha dicho...

Mira que es mala suerte que existan tantos vínculos con Suiza, en serio. Lo de los suizos de verdad era una excusa, una forma de explicar un mal moomento en el un reloj estaba demasiado presente.

En cuanto a ti cris, tiré el reloj hace mucho tiempo y me quise comprar un gallo de pulsera, pero los de greenpeace esta haciendo campaña en contra porque dicen que es vejatorio e inhumano. Y yo a los de greenpeace les respeto mucho no sea que vayan a atracar el Rainbow Warrior en el Manzanares.

7:34 p. m.  
Blogger Msc ha dicho...

El tiempo es una cadena que nos engancha por la muñeca

8:15 p. m.  
Blogger Larha ha dicho...

A mí me ocurre igual (ya he leido los comentarios y entendido está) pero con Ana Belén, no tiene explicación, pero así es :-)

Un beso

10:47 p. m.  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Qué mala suerte con el reloj! Yo tuve un swatch igual, igual. Cuando estaba con más gente se quedaban pensando si podía sonar tanto mi reloj y la respuesta era que sí. Mi adolescente se dedica a esconder cualquier reloj que suene, a quitarles las pilas o a meterlos en un cajón porque no soporta el tic tac, tic tac. He tenido dos o tres relojes swatch y la verdad es que ninguno me ha resultado muy bien, que digamos. Besos y gracias.

11:00 p. m.  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Creo que mi insomnio nació por culpa del quejido de unas agujas. Cuando, de noche, la casa quedaba en silencio, las malditas agujas sonaban a mi alrededor. Tic, tac, tic, tac. Y en cada tic se me iba un segundo de sueño y en cada tac iban naciendo las ojeras.

Hace años que no llevo reloj, pero reconozco que me paso el día preguntando la hora (un pequeño autoengaño).

Besos.

11:16 p. m.  
Blogger Lula Towanda ha dicho...

Como dice el bolero: reloj no marques las horas...

Si inventan un reloj que estire el tiempo me lo compro, aunque sea suizo.
Me faltan horas en el día para las ocupaciones que me busco, por eso llevo tanto retraso en la lecturas de mis blogs favoritos

1:51 a. m.  
Blogger Bito ha dicho...

Vaya día el de hoy, es el tercer blog que leo hablando del tiempo... curioso monstruo que sin existir ha cobrado tal importancia.

6:14 p. m.  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Mmmh... soy suiza. Me parece idiota tu texto. Y mas idiotas tus excusas en los comentarios. Mira, no voy a perder tiempo contigo, que el tiempo vale mucho, dentro o fuera de un reloj. Hasta luego y que seas feliz con tu amargura.

11:38 a. m.  

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